mariachi en el ruta 4

ibamos mi amigo Carli y yo a Galerías, pero antes nos quedamos de ver en Padre Mier y Cuhautemoc, para tomar el ruta 4, compramos nuestras botanas para el camino y asi no gastar en el moll.
Ví que venía el camión, lo abordamos, y ya venímos poniendonos al día, que si esto, que si lo otro, en eso, se sube un cantante, digo, por aquellos que no saben que en el transporte público contamos con el servicio de entretenimiento, diversos shows y demás.
se subió un señor con apariencia de mariachi, bueno al menos eso intentó, lo que si recuerdo es que tenía todo lo que te podías imaginar colgado en su camisa y cuello, toda clase de chacharas, su instrumento era un sonaja de bebé; en fin Carli y yo continuamos nuestra charla, digo los dos tan acostumbrados a ver diversos shows, este no había captado nuestra atención.
En eso el señor mariachi, empezó a entonar el éxito de Luis Miguel, la vikina o bikina, como sea, y digo de Luis Miguel, porque la cantó como él, al ritmo de su sonaja, no quiero mencionar, el tono que alcanzaba, verdad?
pero no solo eso, no le bastaba con toca y cantar, sino que empezo a caminar por el pasillo del camión y entonces, de pronto empezó a dar de vueltas en el pasillo asi como un intento de baile, la verdad aunque Carli y yo queriamos continuar era imposible con tanta distracción, y sus gritos de echaleee mariachiiii, y todo.
de pronto pasando la plaza de la purísima, el chofer freno en seco, y todos acentamos con la cabeza al ritmo, ohhh! como vacas!, y por el espejo retrovisor adiverte al sr. mariachi, - eehh wey, nomás decide, si cantas o bailas, porque luego te vas a dar en la madre y a mi me van a chingar, asi que nomás canta- no manches!, Carli y yo al mismo tiempo sin decirnos nada, soltamos una gran carcajada disimulada, santo cieloooo!
así que sr. mariachi contestó - ta bien, nomás cantaré- ya muy desanimado y sin ritmo, terminó con un -eeeeaaaah- pués asi termina la versión de la bikina, viquina, o biquina de Luismi,
y recuerden por ahi anda una majadera reporteando en el tranporte público que tanto ama, eee hombeee.